27 sept 2010

RECOMPENSA


Y dio otro bocado al sándwich y otro trago a la cerveza. Agradeció que le hubiese llevado el almuerzo y me dijo que hacía semanas que no comía nada caliente. Últimamente no se pasaba por el albergue. Allí le obligaban a lavarse y a cambiarse de ropa y estaba arto de recibir órdenes.

Me preguntaba como un tipo así podía verse de esa guisa.

Otro día, mi vena solidaria me impulsó a invitarle a comer un plato de sopa caliente en casa. Y aceptó.

Cuándo mamá abrió, sus ojos se clavaron en los de él.

_ ¿Has vuelto?

Le miré y dije:

_ ¿Papá?

2 comentarios:

  1. Cortito y bueno ,todo esta dicho . Hay mucho de tu alma de chica tirando a buenita. Marisa

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