¡Dios! No me oye...Ese hilillo de sangre...¿De donde sale? Esta manchando de rojo la moqueta...¿Qué hago? La cogeré, y la llevo a la cama. No, no creo que esté muerta, es solo que al caer se dió contra la pared y perdió el sentido.
¡Uf! Lo que pesas Carmen, ¡Que bien hueles! Como me pone tu olor a lavanda, y tu pelo suave como la seda...estaría toda la vida acariciándolo...te limpiaré, no me gusta la sangre que lo ensucia, ni su tacto pegajoso...Carmen, te prometo que nunca mas volverá a ocurrir esto. Si quieres, volveré a la clínica y no salgo hasta estar libre del alcohol ¡Te lo juro! ¿Me oyes? Y luego buscaré trabajo, y volveremos a ser felices...
Mira, esto es agua oxigenada, no te dolerá...Es solo un corte en la nuca y como tienes la piel tan fina... verás como para enseguida de sangrar...Ya , ya parece que se corta.
Carmen ¡Dime algo! Insúltame, di lo que quieras ¡Pero habla!
¡Yo no quería hacerte esto!, ha sido un accidente...Llamaré a una ambulancia...No, ya es tarde. La policía... Todo es inútil, no puedo vivir sin ti. Es mejor que me vaya yo también. Sí, me acostaré aquí contigo...Y pum...
Felipe , Ingrid; Aquí está el segundo final, realmente este es el q. todo el mundo espera, el anterior, solo era un juego para ver como los lectores se quedaban aluzinados con algo q. no esperan. Lupe fue la primera en protestar, (ya conocía el texto de clase),me dijo q. la había cag...Así q. este es el cambio y final definitivo. Marisa
ResponderEliminarAsí me gusta, los asesinos son así, se quitan del medio después de haber matado a pobres desgraciadas.
ResponderEliminarTienes que vigilar los tiempos verbales (la cogeré y la llevo a la cama...)
Está bien está bien, te haré de negra una vez más.
Bsss
Marisa, el cuento ha mejorado; pero, en vez de un pum, queda mejor un bang!, como más de arma. Pero lo bueno si breve dos veces bueno.
ResponderEliminarAbrazos, H.
Siento no compartir la opinión de Lupe y Felipe. Me gusta este relato x ser más corto pero es demasiado obvio, no aporta nada nuevo, la historia es conocida, no sorprende. Prefiero el otro, sin dudas.
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