16 ago 2010

¡Jo! ¡Que noche la de anoche!


Yo había salido al descansillo para dejar la basura fuera del apartamento con la idea de bajarla al día siguiente, cuando un golpe de viento cerró la puerta. No tenía llaves y me encontraba completamente desnudo. Estaba maldiciendo mi estupidez supina cuando oí que se abría el portal, espantado pensé donde podría esconderme de quien fuere, pero no había mucho donde elegir y decidí aplastarme contra la pared. Cerré los ojos con esa ridícula sensación de que no viendo yo mismo, nadie me podría ver tampoco, y esperando que quizás con algo de suerte quien fuere se quedara en el primer piso. Click, la luz, tenue pero suficiente se encendió en todo el edificio, se me ocurrió romper la bombilla mas cercana, pero no había tiempo. Unas risas subían las escaleras acercándose más y más...
_ Quita tío, espera un poco... enseguida llegamos...
Mierda, era la voz de mi vecina de arriba, como siempre con alguien colgado del brazo y para colmo medio sopa. Pasarían por mi lado irremisiblemente. Maldije con todas mis fuerzas el día que se me ocurrió mudarme a aquella casa, más barata sí, pero sin ascensor, de paso maldije mi manía de andar por el piso en cueros y deseé con todas mis fuerzas que todo fuera un mal sueño, pero no lo era...
_ -Ya solo queda un poco- decía la mujer en tono alegre.
El sudor me caía por todas partes, no me moví, seguía incrustado de cara a la pared, como una calcomanía. Los pasos se acercaron...
_ ¿Y eso? ¨ -dijo el hombre- que desprendía un fuerte olor a alcohol.
Y de pronto... sentí una palmada en el culo.
_ “You can leave your hat on”. Tarareó la mujer al pasar por mi lado y se perdieron canturreando escaleras arriba al tiempo que reían ridículamente.
Recordé la película, “Full Monty” pero yo a diferencia de los protagonistas ni siquiera tenía sombrero para taparme... Y seguí allí solo... hundido en la miseria.
Me senté en el suelo e intenté pensar como solucionar el problema, la casa no tenía portero, ningún vecino tenía llave de mi piso, eran las dos de la madrugada, empezaba a hacer fresco y a todas luces estaba jodido.
Lo único que se me ocurría era pedir ayuda a la pareja, pero después de la palmadita y la absoluta falta de curiosidad, se me antojaba tremendamente humillante decirles nada, además con las prisas que llevaban, seguro que ya estarían en plena faena... Decidí esperar a que se marchara aquel tío. Después... ya veríamos.
La casa estaba silenciosa y oscura, me quedé semidormido, una puerta se cerró y alguien pasó rozándome escaleras abajo, tuve el tiempo justo de encoger las piernas para que no tropezara conmigo, por fortuna no encendió la luz y ello me libro de su choteo. Oí como se cerraba el portal y de nuevo el silencio se hizo presente. Era el momento de hacer algo. Subí sin mucho ánimo al tercero, su piso quedaba justo encima del mío. Llamé al timbre...
Una bata de seda verde llena de flores abrió la puerta...
_ Vaya... es la primera vez que me viene un cliente ya desnudo. ¿Tanta prisa tienes cariño?
Yo no apartaba los ojos de la bata, no me atrevía a mirarle a la cara...
_ No, no... es que yo... bueno soy el de abajo... me vieron hace un rato “Full Monty...” ¿Recuerda? _ ¡Ah...ya!... Y ¿qué pasa? ¿Te ha dado por ir en cueros de un lado a otro?...
Le expliqué lo de la basura... la maldita puerta. Ella comenzó a reír y yo cabreado hasta el infinito, tratando de taparme con las manos mientras mis ojos seguían fijos en las malditas flores...
_ Pasa, pasa hombre, veremos que se puede hacer. Toma, cúbrete si quieres, aunque a mi me da igual.
Y me largó un enorme sombrero de paja que colgaba del perchero y que tenía un gran lazo azul...
_ Ahí tienes. ¿No era un sombrero lo que te faltaba?
Le di las gracias y pasando por alto la ironía lo sujeté a la altura adecuada. Ya más calmado le dije:
_ Mire, lo que quisiera, es que desde su balcón, tratar de acceder al mío que se encuentra justo debajo, si me prestara un par de sábanas, me descuelgo y todo arreglado. Creo...
_ Vale hombre, por sábanas que no quede, precisamente estaba cambiando la cama.
Enseguida vino con ellas, me ayudó a anudarlas y salimos al balcón. Até a la barandilla un extremo y descolgué el resto, quedaban un poco cortas pero servirían. Le di las gracias y su estúpido sombrero. Ella mantenía una media sonrisa de cachondeo que me tenía histérico, con lo cual mi pobre pene no pudiendo soportar por más tiempo tanta tensión había decidido desaparecer escondiéndose Dios sabe donde. Por ello y para librarme cuanto antes de su presencia sin pensarlo dos veces me lancé al vacío. Ya nada importaba, ni siquiera el aspecto absurdo que seguro tenía. Solo quería huir.
Ella desde arriba intentaba sostener el artilugio para que no me balanceara, eso sí, sin perder la risita... Cuando gritó :“¡Cuidado!”. Ya era tarde, un nudo se había aflojado y desde una altura de dos metros caí a mi balcón estrepitosamente.
Como pude me levanté y furioso, de una patada, abrí el balcón de mi apartamento, dentro corrí hacia la puerta principal y la pateé hasta quedar sin fuerzas, cuando no pude más me tumbé extenuado en el suelo. Al rato me arrastré hasta mi cama, allí sin poder conciliar el sueño repase mis dos años de emancipado y sin saber porqué recordé el aroma de las sabanas recién planchadas de mi madre ¿cuánto tiempo llevaba sin lavar las mías? Y luego me vino a la memoria el olor de las croquetas recién hechas, crujientes...
Era hora de regresar a casa.

5 comentarios:

  1. A quien lo lea .Por-fa:hacer el comentario que os parezca aunque sea para ponerme a parir. Con las criticas se aprende ,pero si os gusta¡Que bien!MARISA GRUMPY

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  2. Marisita... sin palabras, me dejas sin palabras.
    Ingeniosa, simpática y muy realista.
    Buscaré una foto apropiada.
    ¡¡Brava!!
    Muchos besos

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  3. Me ha encantado!!!!!!
    Creo que crear un personaje tan distinto a ti, darle vida,cuerpo y que al margen de la historia tan cómica, suene real o incluso posible, es un gran mérito.
    La historia engancha y es divertida, así que nuevamente te felicito.

    Un beso

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  4. !!!!Quiero a mi mamá, ella si que me sabe cuidar!!!!
    Ante la frustración nada mejor que mamá.... Pero creo que si quiere crecer nunca son buenos los pasos atrás.
    Sería mejor que lavará las sábanas, e hiciera una copia para algún amigo o para la vecina de arriba..... just in case...
    Me ha gustado la historia.
    Besos

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  5. Genia. Me reí mucho. Pero no se vuelve, es sólo un bajón pasajero, sobre todo si tenía cojones para salir al palier en idem. Gracias.

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