7 nov 2010

Identidad uniforme

Rutinariamente, intercambio sus pulseras identificativas y cualquier objeto que, de algún modo, permita a sus madres reconocerlos individualmente.
Mi misión, cruel en apariencia, es fundamental para el futuro Bienestar de nuestra Sociedad. Los Protectores así lo han manifestado y ellos nunca se equivocan.
Gracias al experimento —del que modestamente formo parte— se demostrará que los lazos familiares no son sino un invento de sociedades atrasadas, y, consecuentemente, que es más racional mantener el cordón umbilical de los sentimientos con el Estado, que vela por el Bien Común.
Incomprensiblemente, he flaqueado al prometer a mi madre que conocerá a su verdadera nieta. Y voy a cumplirlo.

3 comentarios:

  1. ¡Has vuelto!
    Me alegro mucho.

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  2. Me gusta. Espero que los Protectores no sospechen que tu protagonista actúa en contra de las normas del Bien Común. No hay duda que lo recluirían en la Celda de los Sentimentales (esos viejos locos) y se verian frustradas las ilusiones de su pobre madre.

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  3. Bravo!!!.Dices mucho y callas tanto de una sociedad que se nos viene encima y que nos axfisiara si aún no lo hizo.

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